¿Que tendrá el Mar, los Océanos y sus límites en la playa? ¿Será la inmensidad de su superficie que cubre todo el horizonte, será el volumen de sus aguas que todo lo ocupa o será el vaivén de sus olas que hipnotizan la mirada? No sé lo que será pero de lo que sí estoy convencido es de la atracción que de él emana y que te imanta en sus orillas.
El ser humano, desde su existencia en los orígenes de la evolución, siempre ha estado vinculado a la Mar, inicialmente con la pesca y la navegación de sus aguas y posteriormente de una forma más poética y romántica. Lo cierto es que algo de atracción debe existir cuando se puede comprobar que, ya un bebé que apenas puede gatear,se arrastra hacia la orilla con tal de alcanzar esas olas que vienen y van.
De lo más recomendable es una terapia sentado en la arena humedecida de una playa mientras nos acaricia con sus olas delicadas, preferentemente al atardecer viendo consumir los minutos de sol, escuchando el oleaje y las gaviotas de fondo, ensimismado en el devenir de las olas y respirando esa brisa tan especial procedente del mar, que te transmite una tranquilidad y sosiego tal que te tranforma en un ser inmerso con la naturaleza marina que te rodea.
Y no decir nada de la inspiración que ha ocasionado el Mar en la poesía y la música, estando ambas repletas de ejemplos que no puedo ilustrar nada más que con este maravilloso poema de Pablo Neruda que sintetiza todo lo que se puede decir de la Mar.
NECESITO del mar porque me enseña:
no sé si aprendo música o conciencia:
no sé si es ola sola o ser profundo
o sólo ronca voz o deslumbrante
suposición de peces y navíos.
El hecho es que hasta cuando estoy dormido
de algún modo magnético circulo
en la universidad del oleaje.
No son sólo las conchas trituradas
como si algún planeta tembloroso
participara paulatina muerte,
no, del fragmento reconstruyo el día,
de una racha de sal la estalactita
y de una cucharada el dios inmenso.
Lo que antes me enseñó lo guardo! Es aire,
incesante viento, agua y arena.
Parece poco para el hombre joven
que aquí llegó a vivir con sus incendios,
y sin embargo el pulso que subía
y bajaba a su abismo,
el frío del azul que crepitaba,
el desmoronamiento de la estrella,
el tierno desplegarse de la ola
despilfarrando nieve con la espuma,
el poder quieto, allí, determinado
como un trono de piedra en lo profundo,
substituyó el recinto en que crecían
tristeza terca, amontonando olvido,
y cambió bruscamente mi existencia:
di mi adhesión al puro movimiento.
-Pablo Neruda. El Mar-
♫Mychael Danna – Sky 7. Música relajante a la brisa del Mar♫
Y si lo quieres experimental y no lo tienes cerca de tí, cierra los ojos, inspira y vuelve a abrirlos observando y escuchando este vídeo.
♫Ocean DVD – Blue Seas with Relaxing Videos of Beaches with Nature Sounds. El sonido del mar a tu lado♫
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2 comentarios en «La atracción de la Mar que te imanta»